Hay amistades que no suelen llamarse amigos, son personas que estan a tu lado sin darte cuenta, estan en un gesto, en una pequeña acción, son partes de tus días y noches, son fundamental sin saberlo, ellos hacen tu vida, y recorren el camino a tu lado, sin importar el peso, el obstáculo o la circustancia, los necesitas, suelen ser más que la propia sangre, son hermanos de otra vida, una canción de fondo especial, piensan más por uno que en si mismos, no importa las horas o el sol que les caiga encima, ni el dolor de estar parado a tu lado, ni mentir en tu nombre en vano, son personas con el defecto de aceptarte como persona, no importa el humor o el rechazo, esta la confianza que estará al otro día. Tal vez no te hice reir lo suficiente, y no pude recorrer mas tiempo a tu lado, tal vez no fueron las palabras adecuadas pero si se que extrañare estar a tu lado, no importa lo que será de mañana, porque he recordado los días de nuestro pasado, pero si me dolera vivir despúes de otra noche,
Mientras la resequedad de mis pies sienten la ardiente arena y quieren tumbarse en la humedad a poco despues de un largo camino, lamiendo mis labios reventados por el viento a punto de saber a hierro fundido, mis ojos se cierran cada segundo por el sol picante que lastima mi piel, mi garganta se seca con cada golpe de suspiro que doy, son mis manos sudadas de arena como si fuese un imán de tal, mi cabello se desprende poco a poco y solo doy un paso a la vez por la pesadez de mi cuerpo y el viento tan fuerte. ¿Es este un acto de sacrificio? mientras avanzo puedo escuchar estruendos, un sonido inquietante, mi corazón se aceleraba, quería llegar al final del camino, el viento hablaba en ese lugar, a lo lejos tal vez cincuenta, no...cien, cien metros pude ver, como las olas crecían, la inmensidad del agua, estaba intranquila, sentía temor, ellas venían hacia a mi, con todas sus fuerzas, una tras otra, a larga distancia su color era azul, luego celeste y cada vez mas cerca sus tonos cambiab